El pasado 15 de diciembre la sede central de la Cámara de Lugo acogió el acto de clausura y entrega de diplomas de los cursos “Creación y Consolidación de empresas” y “Plan de mejora del pequeño comercio”, que siguieron 35 participantes, entre emprendedores y titulares de pequeños comercios. Estos cursos se encuadran dentro del convenio de colaboración firmado entre la Consellería de Traballo e Benestar, la Fundación Incyde y el Consello Galego de Cámaras, para la realización de programas de formación y asesoramiento empresarial de carácter gratuito, gracias a la cofinanciación del Fondo Social Europeo y la Xunta de Galicia. Estos cursos surgen, según explicó el presidente de la Cámara, Eduardo Núñez-Torrón, para “facilitar la adaptación de los profesionales a las nuevas exigencias comerciales”, puesto que “la falta de recursos propios, añadió, así como las dificultades de acceso a la financiación y una escasa formación empresarial son los problemas más destacados con los que se enfrentan no solo los emprendedores, sino también muchos de los pequeños empresarios de la provincia”. Según informaron los organizadores, más del 36% de los participantes en estos programas fueron mujeres emprendedoras, y los proyectos que se realizaron a través de estos programas, si se ponen en marcha, supondrán en unos años una facturación superior al millón de euros.
UN PROXECTO CHANTADINO
Dos de los emprendedores que participaron en uno de estos programas, Xesús Mazaira, Ricardo Gómez y Ana Vázquez, expusieron su proyecto de empresa (Quesos Airas Muniz S.L. de Chantada), que se dedicará a la fabricación artesana de productos tradicionales de quesos, requesón y postres lácteos que combinaran con productos de la zona (castañas, nueces, uva, etc.), pero además realizará visitas a la fábrica, a la granja y su entorno y catas de productos en las instalaciones. Para estos emprendedores “el motivo fundamental que nos ha movido a iniciar este proyecto, es el dinamizar y potenciar el desarrollo, social, económico y productivo de la Ribeira Sacra lucense, activando y potenciando la permanencia y desarrollo de las zonas rurales, que progresivamente están perdiendo población y por ende nuestras tradiciones, nuestra forma de vida”.